Enami trabaja en tres areas para modernizar su rol de fomento
El vicepresidente ejecutivo de la estatal, Roberto de Groote, entregó los detalles del desafío impuesto por la Presidenta Bachelet: que la Empresa Nacional de Minería debía actualizarse para retomar su función que la originó.
A pocos días de que la Presidenta Michelle Bachelet, en su primer discurso a la nación, anunciara la modernización de la Empresa Nacional de Minería (Enami), su vicepresidente ejecutivo, Roberto de Groote, conversó con ESTRATEGIA para entregar detalles de este desafío. Tres ejes de acción son los que tiene por delante la estatal: actualizar las fundiciones; la gestión de los recursos humanos; y las llamadas funciones críticas, que en términos simples es volver a internalizar ciertas actividades.
La modernización apunta, principalmente, a la Fundición Hernán Videla Lira (Paipote, Región de Atacama), pues se requiere inyectar recursos para cumplir con las normativas ambientales (que comenzarán a regir en diciembre de 2018). “Eso significa de un plan con inversiones, que aún no pueden ser precisadas, porque todavía hay que estudiar los proyectos en profundidad”, advirtió de Groote.
Puntualizó que “todavía estamos analizando tres proyectos, de las 56 alternativas que teníamos inicialmente, y se estima que esas inversiones puedan ser del orden de entre los US$400 millones a US$500 millones”.
No obstante, la modernización de la compañía también tiene otra arista, según recalcó su vicepresidente ejecutivo, ya que existen sectores que requieren un nuevo impulso y reordenamiento estructural. “Además hay otras áreas que modernizar dentro de la empresa, como toda la gestión en recursos humanos, porque no existe una política establecida. Por ejemplo, no existen evaluaciones de desempeño o certificación de competencias”, detalló.
Según el ejecutivo, Enami también requiere actualizar sectores administrativos, básicamente los sistemas de información. “Acá hay deficiencias importantes, lo que no permite contar con datos en línea, como para poder localizar o establecer parámetros con el fin de medir la gestión de forma periódica para tomar decisiones”, describió.
Otro punto que debe modernizar la estatal, según De Groote, es lo que él llamó “funciones críticas”, que son las competencias relacionadas con el personal, puesto que gran parte están externalizadas, como el poder de compra. “Hay momentos en que se toma la decisión de cuál es la ley que se le paga al proveedor. Eso en algunas partes está externalizado, y en mi opinión eso hay que revisarlo por completo. Y eso es modernizar, y poder efectivamente internalizarlo”, sostuvo.
Rol de fomento
Respecto a la realidad que viven las plantas de Enami, y de sus mejoras, éstas tienen relación con el abastecimiento, el cual genera un desbalance: al existir un exceso de stock, el cual no necesariamente es el insumo que se requiere; o, en otras, hay déficit.
“Esto se debe a nuestra forma de operar, porque a los mineros que llegan con el material, y una vez que estén empadronado y tienen su plan de trabajo, estamos obligados a comprarles. Es el rol de fomento, y no es un desorden”, explicó Roberto de Groote.
El rol de fomento es parte esencial de la empresa estatal, función que tiene claro su vicepresidente ejecutivo, ya que indicó que el impulso que pretende darle el Gobierno responde a la realidad.
“Las cosas van cambiando en el tiempo, por lo que se requiere reanalizar las necesidades que hoy tiene el sector para poder desarrollar sus actividades de mejor manera. Actualmente se contribuye con ellos reconocer las reservas, a hacerles un plan de explotación, darles créditos y adquirirles el bien. Estos instrumentos debemos reanalizarlos y perfeccionarlos si se requiere, sobretodo lo referente al crédito y el plan de explotación”, subrayó.