Deuda de empresas mineras crece casi siete veces en los últimos once años
Pese a la reducción de las inversiones desde 2012, el flujo de caja también bajó por lo que muchas de éstas se financiaron con endeudamiento, según el Boston Consulting Group.
El crecimiento de la deuda neta de las empresas mineras en el mundo ha tenido un crecimiento explosivo en los últimos años. Según datos del Boston Consulting Group (BCG), mientras en 2005 esta totalizaba unos US$ 35 mil millones, once años después -en 2016, según datos al primer semestre- sumaba US$ 231 mil millones, lo que se traduce en un alza de casi siete veces en el período. Lo anterior, aún cuando el valor de mercado de las firmas fue relativamente similar en ambos ejercicios.
El año pasado, el nivel de deuda mostró una leve reducción respecto de 2015, cuando fue de US$ 235 mil millones y alcanzó el récord de la década.
Gustavo Nieponice, socio y managing director de BCG, señala que esto se explica porque si bien a partir de 2012 las mineras definieron la disciplina en el uso del capital como una prioridad, la realidad es que en muchos casos esto no se llevó a la práctica en su totalidad. “Si bien el nivel de inversión se redujo a partir de 2012, el flujo de caja disponible para financiar las inversiones también cayó, y las inversiones se financiaron en muchos casos con deuda. Adicionalmente, los costos unitarios de inversión se mantuvieron altos, lo que hizo que la misma inversión absoluta generara menos producción adicional”, comentó el ejecutivo.
En paralelo, el valor de mercado de las mineras ha caído fuertemente, y entre 2010 y 2016 mostró una reducción de 51%.
Cambio urgente
Las mineras están haciendo esfuerzos por mejorar su situación en un escenario que no es fácil. Ejemplos claros de ello son Codelco y AngloAmerican, ambas empresas con altos niveles de deuda y con ambiciosas metas para mejorar sus balances.
Todo esto ante un panorama en donde el precio del cobre, aunque ha repuntado en el último tiempo, lo hace tras ir a la baja fuertemente en los últimos años. Eso sí, las perspectivas son mejores para este 2017.
Sin embargo, el desafío en el sector minero es inmenso. De partida, y tal como lo ha advertido Nieponice en otras oportunidades, las compañías deben concentrarse en recuperar la confianza de sus inversionistas, ya que si bien entre 2005 y 2010 la industria generaba retornos de 31%, entre ese último año y 2015 quienes apostaron por ella perdieron 17% de su valor anual, por lo que ha ido bajando su atractivo. Para que recuperen ese aspecto, Nieponice asegura que será necesario que cambien su estrategia.
Más que seguir recortando costos, la clave será implementar importantes mejoras en términos de productividad y buscar maneras para crear valor y atraer a los inversionistas.
El caso de Chile es complejo, porque la minería ya está muy avanzada y el territorio ha sido muy explorado por lo que es difícil encontrar yacimientos tan atractivos como en el pasado.
Las empresas que buscan crecer en el país en los próximos años deberán ser capaces de explotar activos de baja ley de mineral, entendiendo por ello la cantidad de mineral extraído por roca removida.