Teck mira con optimismo Quebrada Blanca 3 y encuentra más mineral de lo programado
La minera canadiense informó que si bien no han finalizado los estudios, aumentaron los recursos potenciales desde 4 mil millones a 6,5 mil millones de toneladas.
Mientras la canadiense Teck está enfocada en su proyecto Quebrada Blanca II (QB2), el que alcanza el 14% de avance, la minera se encuentra en pleno trabajo de estudios de alcance para una tercera fase, ya que con la iniciativa actual sólo se está aprovechando el 25% del mineral disponible.
Y a pesar que el trabajo previo para QB3 no ha concluido, la compañía ha logrado identificar mejores potencialidades del yacimiento, lo que podría derivar en mejores perspectivas para lo que se decida en el futuro.
“No quiero adelantarme demasiado hasta que finalice el estudio de alcance y podamos divulgar los detalles, pero tenemos un recurso que es mucho más grande de lo que creíamos hace un año. Hemos aumentado el recurso mineral de 4 mil millones a 6,5 mil millones”, señaló el presidente y CEO de Teck, Don Lindsay, en conferencia con analistas tras presentar los resultados correspondientes al segundo trimestre de este año.
En su intervención, se detuvo en al menos cuatro puntos, destacando la relación de bandas como la ventaja competitiva estructural que es clave para QB2. “El plan de mina que publicamos es de 0,7 a 1. Para todo el recurso, es 0,8 a 1. Eso es significativamente más bajo que algunos de los nombres más importantes en el negocio del cobre como Collahuasi, Antamina o Escondida”, dijo, agregando que en la práctica significa más eficiencia.
También destacó la naturaleza del terreno que brinda más espacio para construir grandes plantas a diferencia de lo que ocurre en algunas de las operaciones y la capacidad de relaves que están construyendo.
Don Linday aseguró que esa combinación de factores no ocurre tan a menudo y en un país con una buena jurisdicción geopolítica, como para concentrarse sólo en la expansión gradual de QB2 y lo que han denominado QB3 en los próximos 10 años aproximadamente.
Por lo tanto, indicó que están mirando diferentes modelos donde uno de las posibilidades sería una expansión del 50%, la que “sería increíblemente eficiente en términos de capital porque creemos que podemos hacerlo sin construir nuevas tuberías”. Otra alternativa que está sobre la mesa es duplicar QB2 para llevarlo a más de 600 mil toneladas de cobre en concentrado por año. “Estas son sólo estimaciones que apoyaremos con el estudio de alcance”, enfatizó.
En abril, en el marco de su visita a Chile, el ejecutivo de la canadiense reconoció que creen que existe potencial para duplicar QB2 y tomar la operación a más de 400 mil toneladas diarias de producción. “Esto haría que, combinadas QB2 y QB3, fueran una de las principales cinco minas de cobre del mundo”, aseguró en esa oportunidad en conversación con Diario Financiero.
Además, fue cauteloso a la hora de dar luces de la decisión definitiva que tomarán con respecto a la tercera fase, enfatizando que “no podríamos ver algún tipo de proyecto hasta tener el estudio de prefactibilidad y factibilidad. Mientras tanto vamos a construir QB2 y posiblemente cuando QB2 esté listo podremos ver QB3”. Se espera que la empresa anuncie los resultados del estudio de alcance a fines de este año.