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La tecnología minera innovadora emplea el conocimiento de la ubicación, el aprendizaje automático, la robótica y otras tecnologías que permitirán a las empresas mineras automatizar muchos de sus procesos y pasar de operaciones semiautónomas a totalmente autónomas. Esto no sólo reducirá los costes, sino que también aumentará la seguridad. El uso de camiones mineros, excavadoras y equipos mineros autónomos o teledirigidos permite a veces eliminar a los seres humanos de las tareas peligrosas, evitando así accidentes.

Un ejemplo de tecnología que permite una mayor automatización en la minería es el chirp. Chirp es una tecnología de comunicación inalámbrica que complementa al GPS y al LiDAR para intercambiar datos (mensajes, datos de sensores), determinar ubicaciones y medir distancias, por ejemplo, entre mineros, equipos de minería y vehículos.

Esta tecnología permite a los operadores mineros optimizar las operaciones y reducir el riesgo de accidentes mejorando la comunicación y la coordinación. En combinación con una plataforma IoT que sitúe los datos recopilados en el contexto de la mina en particular (por ejemplo, ventilación automatizada a demanda, planes de turnos, control de tráfico, control de acceso y prioridades de transporte), se espera que estas tecnologías hagan que las operaciones mineras sean más sostenibles al reducir el consumo de energía y la producción de residuos.

La supervisión en tiempo real de los activos operativos aumenta la seguridad y la productividad

La tecnología es cada vez más importante para garantizar la seguridad y la eficiencia en la industria minera, especialmente a medida que las operaciones mineras se vuelven más complejas. Predecimos que, en 2023, las operaciones mineras dependerán en gran medida de tecnologías innovadoras como las tecnologías avanzadas de comunicación inalámbrica, los sensores y etiquetas del sistema de localización en tiempo real (RTLS) y los sistemas de automatización para reducir los riesgos y aumentar la productividad.

La industria minera está aprovechando cada vez más el poder de los sensores industriales del Internet de las Cosas (IIoT) para mejorar las operaciones mineras. Los sensores IIoT son instrumentos digitales que miden, registran y transmiten datos de los activos mineros a los sistemas de gestión/monitorización ascendente, que pueden estar ubicados dentro o fuera de las instalaciones. Las empresas mineras pueden automatizar los procesos e identificar rápidamente los problemas recopilando y utilizando las lecturas de entrada de los sensores de los equipos mineros, el aire, los movimientos de los vehículos y los trabajadores, etc.

La seguridad física aprovecha el conocimiento de la ubicación

Las explotaciones mineras se enfrentan a retos excepcionales en lo que respecta al control de accesos. La mayoría de las empresas simplemente no tienen explosivos ni minerales raros en sus instalaciones.

Los trabajadores con autorización para entrar en zonas sensibles pueden llevar una gorra o un chaleco con una etiqueta de radiofrecuencia con capacidad de localización. Su ubicación cerca de una puerta o portal de acceso controlado puede transmitirse al sistema de control de acceso como factor de autenticación adicional o para abrir el portal automáticamente. El mismo concepto puede aplicarse a los vehículos autorizados que entren en zonas sensibles.

Utilizar la tecnología de localización de este modo puede aumentar la seguridad. También puede ayudar a prevenir robos cuando los bienes de alto valor se etiquetan para enviar una alarma al salir de una zona geocercada. Además, las investigaciones de robos pueden mejorar si se dispone de una pista de auditoría que muestre quién estaba cerca de materiales sensibles cuando desaparecieron.

Mayor atención a la tecnología colaborativa

A medida que las operaciones mineras se vuelven cada vez más complejas y competitivas, las empresas mineras pueden buscar soluciones en las combinaciones tecnológicas. Cada vez se presta más atención a las tecnologías colaborativas para mejorar la coordinación entre personas y máquinas. Mediante el uso de diferentes tecnologías, estos desafíos pueden superarse mejor de las siguientes maneras:

El uso de sensores y tecnologías IoT para supervisar máquinas y equipos: Al conectar vehículos y equipos con sensores, las empresas pueden supervisar máquinas y equipos en tiempo real y detenerlos automáticamente si es necesario para evitar accidentes, por ejemplo.

El uso de LiDAR, una tecnología basada en la luz láser, para añadir exploraciones medioambientales de alta resolución.  Al utilizar LiDAR para cartografiar espacios interiores, las máquinas y los trabajadores obtienen información centimétrica sobre el entorno físico.

En general, el uso de tecnologías colaborativas en la minería es de gran importancia, ya que permite a las personas y a las máquinas trabajar mejor juntas y mejorar así la seguridad, la eficiencia y la productividad en la industria minera.

Adopción de la IA y la analítica

El uso de la inteligencia artificial (IA) y la analítica en la minería ha aumentado significativamente en los últimos años y seguirá desempeñando un papel importante. Mediante el uso de tecnologías de IA, las empresas pueden analizar grandes cantidades de datos y hacer predicciones, lo que a su vez puede conducir a mejores decisiones.

Un ejemplo del uso de la IA en la minería es la predicción de las necesidades de material. Analizando los datos sobre volúmenes de extracción y consumo de material, las empresas pueden predecir con mayor exactitud cuánto material van a necesitar. Esto puede ayudar a ahorrar material y aumentar la eficiencia.

La analítica, incluso sin IA, también desempeña un papel importante en la minería. Analizando los datos, las empresas pueden identificar patrones y tomar así mejores decisiones. Por ejemplo, mediante el análisis de datos operativos, las empresas pueden identificar problemas en una fase temprana y evitar así tiempos de inactividad.

Por ejemplo, los sistemas de monitorización remota de túneles basados en IA son cada vez más esenciales para la vigilancia de la minería subterránea. Conocer el estado y la ubicación de los trabajadores y los activos en relación con los parámetros medioambientales es fundamental para explotar las minas de forma eficaz, segura y productiva.

Un enfoque lógico es combinar una plataforma IoT con una capa analítica que consuma los datos mineros recopilados para permitir la prevención de accidentes, la detección de atascos y el mantenimiento predictivo. Esto puede reducir los costes en ambos extremos: en la mina o en el tajo, evitando que los equipos no funcionales bloqueen los procesos, y en la cadena de suministro, permitiendo la planificación a largo plazo para comprar material cuando esté disponible y al menor coste.

En general, el uso de la IA y la analítica en la minería es de gran importancia para aumentar la eficiencia y la productividad y para tomar mejores decisiones. En el futuro, el uso de estas tecnologías en la minería será aún más importante para afrontar los retos de la industria.