SQM expande negocio del litio a Argentina y pone presión a disputa con Corfo
Firma adquirió el 50% de las acciones de Minera Exar para desarrollar proyecto en salar Caucharí-Olaroz. Potencial iguala producción actual en Atacama.
Después de seis meses de negociaciones, ayer SQM -firma ligada a Julio Ponce Lerou y la canadiense Potash- concretó su ingreso al negocio del litio en Argentina, al adquirir el 50% de Minera Exar, filial de Lithium Americas Corp (LAC).
Según señala Pablo Altamira, gerente de Desarrollo y Planificación de SQM, la adquisición permitirá a la minera no metálica diversificar sus fuentes de abastecimiento de litio y otros derivados, que hoy dependen exclusivamente de los yacimientos que tienen en Chile y que le son arrendados por Corfo, entidad estatal con la cual mantiene abierto un arbitraje por el pago de regalías.
“El hecho de buscar nuevos activos y oportunidades fuera del país es un ejercicio que se hace desde hace tiempo en SQM”, dijo el ejecutivo.
El acuerdo con Minera Exar -por el cual desembolsaron US$ 25 millones- le permitirá a SQM acceder a una producción potencial de unas 40 mil toneladas métricas de litio y derivados. El año pasado, SQM produjo unas 35 mil toneladas de estos productos en el salar de Atacama.
Altamira señala que en un principio, el acuerdo con LAC contempla la actualización del estudio de factibilidad del proyecto que se desarrollará en el salar de Caucharí-Olaroz (en el norte de Argentina), para lo cual se destinarán US$ 10 millones, luego de lo cual se determinará el potencial de la iniciativa.
Este estudio tomará entre 12 y 18 meses. “Luego de eso, y si es que se toma la decisión de inversión, podría estar produciendo en dos o tres años”, dice el ejecutivo.
Arbitraje con Corfo
La expansión del negocio del litio a Argentina le pone presión a la disputa que la firma mantiene con el Estado, ya que el pacto de accionistas firmado con LAC le permitirá a SQM tomar el control total de la operación en el futuro, sumando la potencial capacidad de producción.
Altamira señala que esta opción se analizará una vez que el estudio de factibilidad establezca la conveniencia de la explotación económica del yacimiento. Esto, en el contexto que la entidad estatal busca la restitución anticipada de las concesiones mineras arrendadas.
Pese a que SQM considera que la operación trasandina es “complementaria” a la que tienen en Chile, por su tamaño tiene el potencial para reemplazarla, aunque con leyes de mineral menores.
“Este es un proyecto absolutamente complementario al Salar de Atacama. Nosotros tenemos toda la intención de seguir mejorando lo que hacemos ahí, hemos dado muestra de nuestras mejoras en productividad significativa. Incluso, este proyecto queda a la misma altura del Salar de Atacama y bastantes cerca, a unos 300 kilómetros, y desde ya estamos viendo posibles sinergias significativas y que posibilitarán que los números sean mejores”, dijo.
El ejecutivo descartó que la disputa con Corfo fuera el motor para la diversificación de la firma. El contrato con la estatal dura hasta el 31 de diciembre 2030, pero la cuota de extracción de material que tienen autorizados se completará en no más de 10 años.
“Este proyecto lo vemos como algo absolutamente separado del tema de Corfo, es un proyecto complementario al Salar de Atacama. Estamos muy tranquilos porque creemos tener los argumentos que nos van a hacer ser exitosos en el proceso de arbitraje. Nuestro compromiso es seguir estando en Chile”, dijo.
SQM estimó que la demanda global de litio y sus derivados alcanzó a unas 150 mil toneladas en 2015, y espera un crecimiento de 10% para este año. El año pasado, esta línea de negocios representó el 13% de los ingresos totales de la minera no metálica.
¿Efecto Macri?
Altamira señaló que las condiciones de inversión en Argentina han mejorado -aunque no lo atribuye directamente al cambio en el ciclo político- y que este país también ofrece ventajas respecto de la propiedad de las pertenencias mineras explotables: mientras que en Chile éstas son del Estado y se arriendan a privados, en el mercado trasandino las empresas son dueñas de ella.
En cuanto a las leyes del mineral, el ejecutivo señala que estas son menores que en el Salar de Atacama, pero que una vez que se termine la revisión de estudio de factibilidad se podrá determinar la explotación económica.
JUICIO ARBITRAL: INFORMES Y PERITAJES EN CURSO
El juicio arbitral que enfrenta a Corfo con SQM, y que es llevado por el árbitro Héctor Humeres, del Centro de Arbitraje y Mediación (CAM) de la Cámara de Comercio de Santiago, ya entró en etapa probatoria.
Humeres habría ordenado nuevas diligencias, entre ellas una auditoría interna a SQM Salar a cargo de KPMG para conocer los gastos que reportó entre 2009 y 2014. Asimismo, se le habría encargado a la ex ministra del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) Andrea Butelmann, la elaboración de un informe sobre los costos de explotación de SQM Salar. El año pasado, Corfo hizo pública la contratación del ex Contralor Ramiro Mendoza para la elaboración de un informe que fue utilizado como prueba en el proceso en manos de Humeres, denominado “acerca del derecho aplicable frente al incumplimiento contractual de un privado cuando la contraparte es un órgano del Estado”.
El juicio estuvo a poco de llegar a un acuerdo anticipado hace un año, previo pago indemnizatorio por US$ 18 millones, pero finalmente esto no se concretó. De este modo, el proceso siguió su curso no se espera una rápida solución, por todo el peso que tiene el caso.